miércoles, 24 de septiembre de 2008

EL MERCADO DEL ARTE SE VUELVE LOCO

La semana pasada el artista Damián Hirst recaudó más de 140 millones de euros en la subasta sobre el autor que se celebró en Londres. Para los que no le conozcan Damián Hirst, actualmente mundialmente conocido, es el artista que explora la mortalidad de los seres vivos, su obra consiste en animales o trozos de animales, conservados en formol dentro de enormes vitrinas.


Se están viviendo los remates más desorbitados de la historia. ¿A qué se debe esto? Mucha gente me pregunta si la crisis está afectando al mercado del Arte. Mi respuesta es que como en el resto de mercados la crisis afecta primero a la clase media, los consumidores más habituales de arte son de la clase más adinerada a la que no le afecta la crisis hasta pasados unos años. Por tanto, se siguen vendiendo grandes obras de arte, en subastas sobre todo. Son las galerías y centros de arte los que se empiezan a ver más afectados.

Pero, sobre todo, lo que hay que tener en cuenta es que las cantidades exageradas que se están pagando en las subastas se deben a una auténtica técnica de marketing. Es decir, los grandes y adinerados coleccionistas pujan y pujan por los artistas de los que tienen obras en sus colecciones para que suba el valor de las obras de dicho autor y se, así, revaloricen sus obras.

El Marketing ha llegado pisando fuerte al mercado del Arte. Es una lástima que se pierda ese espíritu del coleccionista que pagaba esas cantidades de dinero porque el placer estético que le proporcionaba lo merecía. Ahora, la gran mayoría son técnicas de mercado para que se coticen más los artistas mejor promocionados. O tienes una buena promoción o no eres nadie.
El arte es hoy, y más que nunca una inversión de capital. Es la tercera inversión en el ranking más recurrida, la bolsa, los inmuebles y después, EL ARTE.

lunes, 15 de septiembre de 2008

Los robos de obras de arte más curiosos de la historia.

Esta semana me gustaría hablar de otro tema relacionado con el arte que siempre me ha divertido mucho, aunque en realidad a mucha gente no haga ni pizca de gracia. Se trata de los robos de obras de arte más curiosos de la historia.
El arte ha sido siempre objeto de fetiche y por lo tanto muy susceptible al robo. Tiene una diferencia frente al resto de los objetos, una fuerza mayor que es el deseo. Los objetos artísticos son objetos que generan placer estético. Los grandes coleccionistas pueden llegar a pagar cantidades desorbitantes por conseguir una obra que además puede que sea la ultima que le falte para completar una colección, esto provoca que se llegue a pagar por el robo mucho más de lo que vale la obra.
Lo que más me ha llamado la atención al estudiar este tema es que la mayoría de los robos de arte más sorprendentes ha sido que se han cometido en los propios museos y me ha hecho preguntarme si no debería ser el lugar más seguro donde conservar una obra de arte.
El robo más polémico fue el robo de once obras maestras de un valor de 100 millones de euros, Rembrandt, Degas, Manet y Vermeer en el museo Gardner de Boston. Fue un auténtico robo de guante blanco. Dos desconocidos se disfrazaron de policías y engañaron a los guardias diciendo que habían recibido un aviso y tenían que entrar en el edificio. Una vez dentro, los ladrones redujeron a los vigilantes, les amordazaron y los encerraron en dos rincones, muy alejados entre sí, del sótano del museo. Desde la una de la madrugada hasta casi las tres, los dos individuos realizaron su trabajo sin ser molestados por nadie: el botón de alarma que los vigilantes hubieran podido accionar no sirvió de nada, porque no estaba conectado con la policía. Los ladrones se llevaron los cuadros y la cinta de vídeo, sin usar ni llevar encima armas de fuego.
En el Museo Nacional de Oslo se robó “El Grito” de Edvard Munch y fue encontrado meses más tarde. Nueve años más tarde se repitió el robo. Dos hombres a plena luz del día y con el edificio abarrotado de visitantes se llevaron los cuadros bajo el brazo , todavía no se sabe nada del destino de los lienzo


En 1991 Varios lienzos del pintor holandés Van Gogh , entre ellos el conocido como "Los Girasoles", fueron robados en el museo del artista pero se encontraron rápidamente en un coche.
Ocho lienzos de Matisse, valorados 11,5 millones de euros, fueron robados en el Museo Matisse de Nice-Cimiez y encontrados doce días después.
Y estos son cuatro de los innumerables ejemplos de robos que se han cometido en museos a lo largo de la historia. Reflejan el déficit de seguridad de los museos y la falta de una legislación que dicte duras sentencias por el expolio del patrimonio artístico.
Más curioso aún es el robo de obras de arte en residencias particulares. De ahí el secretismo de la posesión particular de obras. Los grandes coleccionistas están en el punto de mira de las grandes redes de robo de arte. Estos robos conllevan la investigación de quién posee las obras, la seguridad de la residencia...
Uno de los casos más curiosos y que nos toca muy de cerca es el robo a la casa de la Koplowitz . Robo de 19 entre los que se encontraba “El columpio” de Goya, días más tarde se encontraron diez de estos cuadros que habían sido sustraídos con la supuesta complicidad del guardia jurado de la vivienda.
La “Madonna del Huso” de Leonardo Da Vinci , es la obra más valiosa que no ha sido recuperada. La obra vale 65 millones de dólares y fue robada en agosto de 2003 en un castillo escocés. Los autores simularon ser turistas y recorrieron el castillo acompañados de un guía muy joven. Consiguieron reducirlo y robaron el cuadro.

Dos famosos cuadros de impresionistas franceses, las obras "Paysage a Vetheuil" de Claude Monet y "La Place de Trinite" de Auguste Renoir ambas valoradas en unos siete millones de dólares fueron robados de una residencia vacacional en el suroeste de Florida।
Además de robos para disfrute propio de la obra o para venderlas en el mercado negro, también existen robos como protesta o reivindicación de algún hecho político o histórico, pero ese tema merece un espacio a parte y será el tema que trate en el siguiente blog।